Se fugó uno de los presos más peligrosos de Mendoza: la “Ardilla” Fabián Cedrón
Fabián Cedrón Ortiz, uno de los delincuentes más temidos de Mendoza, conocido como “Ardilla” o “Mata policías”, volvió a burlar al sistema en las últimas horas: condenado a la pena máxima por el asesinato de un policía y un largo prontuario a cuestas, rompió la tobillera electrónica y escapó de la vivienda donde cumplía prisión domiciliaria, en el barrio San Martín de Ciudad de Mendoza.
Cedrón Ortiz se encontraba alojado en la manzana 42, casa 26 del citado complejo, en el marco de un beneficio que había recibido por cuestiones de salud. Según informaron fuentes policiales a El Sol, el sujeto –que actualmente se moviliza en silla de ruedas– arrancó el dispositivo de control y se retiró del lugar sin autorización judicial. El beneficio había sido otorgado por la jueza Mariana Gardey.
La alerta se activó poco después y personal del sistema de monitoreo intentó sin éxito dar con su paradero. La fuga de inmediato encendió las alarmas: no se trata de un evadido cualquiera, ya que es considerado uno de los más peligrosos de la provincia.
Después de ser condenado, accedió a una entrevista con El Sol en la cárcel de Almafuerte y relató sus épocas de fugas y asesinatos en el oeste de Capital y que era amigo íntimo de los delincuentes juveniles ya fallecidos, Fabián Cerón, el famoso Morocha, y Ricardo Videla, el Perro.
El primero fue abatido por la policía y el segundo se ahorcó en una celda. Su caso se hizo conocido por ser uno de los menores condenados a prisión perpetua, lo que generó que Mendoza recibiera sanciones por organismo internacionales.
Cedrón fue sentenciado a prisión perpetua por el crimen del agente Eduardo Sánchez, ocurrido en el barrio San Martín en 2002. Hace más de 20 años, dijo que lo había acribillado porque “le tenía bronca”. Además, durante el debate se burló de la familia de la víctima.
También fue acusado por el asesinato del cabo Gustavo Ramet, ejecutado de un disparo en la cabeza en octubre del 2009 mientras caminaba por el barrio Reconquista para robarle el arma reglamentaria, aunque en este caso fue absuelto por falta de pruebas y luego una testigo reservada declaró y aseguró que él había sido quien perpetró el hecho.
Como no podía ser juzgado dos veces por el mismo hecho, jamás se sentó en el banquillo por el asesinato del cabo que integraba la banda policial. El asaltante Omar Nieto Riquelme se transformó en el único culpable que tuvo ese caso.
El historial delictivo de Cedrón incluye además fugas previas, como la evasión de la cárcel de Boulogne Sur Mer en 2005 y de una penitenciaría de Santa Fe, a la que había sido trasladado por razones de seguridad.
Además, estuvo involucrado en múltiples asaltos a mano armada en Capital y Godoy Cruz, incluso mientras permanecía prófugo, y lideró motines en la cárcel de Cacheuta.
De acuerdo con lo que revelaron las fuentes, efectivos de Investigaciones ya trabajaban en el caso en coordinación con el Servicio Penitenciario, conscientes de que se trata de un delincuente con altísima peligrosidad y antecedentes de evasiones planificadas.
Fuente:El Sol
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